Seguimos la misión.

Y después del Domund, ¿Qué?, el mes misionero extraordinario es y permanece, como huella viva que alienta la labor misionera. Los próximos días celebramos la fiesta de Todos los Santos, y difuntos.
Oración y agradecimiento por tanta buena gente que nos ha precedido e intercede por nosotros y la labor de la Iglesia.

Así pues, seguimos Bautizados y Enviados, anunciando al mundo entero el evangelio, haciendo discípulos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, fieles a la misión sin dejarnos llevar por ideologías, ¡Firmes en la Fe!

Feliz Noviembre.